El 31 de julio de 1955, fecha inolvidable para los Barcelonistas; se produjo uno de los más apasionante encuentros entre Emelec y Barcelona. Fue un partido de alto nivel futbolístico, que en el público causo sensaciones inexplicables durante los 90 minutos de juego. Goles que fueron una verdadera obra de arte y el marcador se movió en todo el pasaje del partido, pusieron un sello sensacional a ese cotejo.
La alineación de Barcelona fue: Ansaldo (Delgado); Jurado, Sánchez y Macías; Vargas (Zambrano) y Alume; Salcedo, Cantos, Chuchuca, Simón Cañarte y Clímaco Cañarte. En Emelec alinearon Cipriano Yulee; Ubilla, Arguello y Rivero; Solís y Herrera; Balseca, Mariano Larraz, Raffo, Jorge Pibe Larraz (Eduardo Guzmán) y Júpiter Miranda.
A penas iniciado el encuentro Emelec anotó a través de Jorge Larraz tras un error de la zaga “torera”. Barcelona salió con mas fuerza, aquel gol de entrada no influyó en lo animico de nuestro equipo y es asi que a los 9 minutos un violento tiro de Simón Cañarte provocó un lanzamiento de esquina. Lo cobró Clímaco y Chalo Salcedo, con espectacular remate, empató el partido.
A los 15 minutos, comete una falta cerca del area Alume, fue cobrada por Mariano Larraz superó la barrera canaria y Júpiter remata y pone la ventaja parcial para los eléctricos, 2 a 1.
Al igual que el primer gol, no mermo los animos de los toreros y se volcó al ataque, producto de esto Barcelona provocó dos tiros de esquina seguidos. En el último, Clímaco cobró, el esférico sobró a Yulee. Salcedo entró y con el pecho introdujo el cuero en las mallas para colocar el empate. Barcelona dominaba en el campo de juego. Surgió entonces la figura de Chuchuca como una pesadilla para la defensa rival. Simón Cañarte recibió de Cantos y retrasó el balón para el Cholo que con soberbio disparo puso por primera vez en ventaja a Barcelona. ganabamos 3 a 2, en los graderios, solo se escuchaba elogios para el Cholo y las exclamaciones jubilosas no paraban cuando Chuchuca fue habilitado por Salcedo con un centro rasante y anotó un golazo para el 4 a 2.
Termino el primer tiempo y los 22 jugadores fueron despedidos con gran ovación por el público que repletaba las graderías del Capwell.
Todos estana confiados de ver un segundo tiempo mas emocionante, y no se equivocarón fue inolvidable por la velocidad y el espectáculo que derrochaban los jugadores. Vargas dominaba el medio campo y a su lado descollaban Pacharaca Alume y “el chiquito Macías”. A los 80 minutos Cantos llevó una lucida carga y puso en acción a Clímaco quien alargó el esférico para su hermano Simón. El gran artillero barcelonés, desde 30 metros, empalmó un misil para poner el 5 a 2, todos los Barcelonistas no lo creian era una goleada histórica para su hermano de Barrio. En el minuto 90 hubo un penal a favor de Emelec que lo ejecutó Mariano Larraz pero el balón dio en el vertical derecho y se perdío la oportunidad de achicar la goleada. Después de tan grande espéctáculo el público despidió de pie y retumbando las palmas, a estos artistas de tan maravillosa obra de arte protagonizada aquel día.
SALVEMOS BARCELONA SC.